¿Hay algo más reconfortante que el aroma a pan recién horneado llenando tu cocina? Si alguna vez has querido preparar tu propio pan integral casero, esta es la receta perfecta para empezar. No necesitas ser un panadero experto ni tener herramientas sofisticadas. Solo un poco de tiempo, ingredientes básicos y muchas ganas de comer rico y saludable.
🧡 Por qué te encantará esta receta
Este pan integral casero no solo es fácil de hacer, sino que también es increíblemente esponjoso, sabroso y mucho más nutritivo que los panes comerciales. Está elaborado con harina de trigo integral, lo que lo convierte en una opción rica en fibra, ideal para quienes buscan cuidar su alimentación sin renunciar al placer de un buen pan.
Además, su textura suave por dentro y ligeramente dorada por fuera lo convierte en el acompañante perfecto para el desayuno, la merienda o incluso como base para sándwiches saludables. ¡Y lo mejor! Puedes hacer 12 porciones con esta receta, perfectas para toda la familia o para guardar y disfrutar durante la semana.
📝 Ingredientes
Para preparar este delicioso pan integral, necesitas ingredientes simples que probablemente ya tienes en tu cocina:
- 250 ml de leche templada (ni fría ni caliente)
- 80 g de mantequilla derretida
- 3 huevos
- 40 g de azúcar
- 10 g de levadura seca
- 700 g de harina de trigo integral (dividida en dos partes)
- ½ cucharada de sal
- 1 yema de huevo (para pincelar antes de hornear)
✨ Dato interesante: Esta combinación crea un pan suave, húmedo y con un toque dulce muy sutil. Ideal para acompañar con mantequilla, mermeladas o aguacate.
👩🍳 Instrucciones
Sigue este paso a paso para lograr un pan integral que te hará sentir orgulloso cada vez que lo prepares:
- Mezcla inicial
En un bol grande, coloca la leche templada, la mantequilla derretida, los huevos, el azúcar, la levadura seca y 350 g de la harina integral.
Usa una cuchara de madera o una espátula firme para mezclar durante 3 a 5 minutos, hasta que tengas una masa homogénea y algo pegajosa. - Primer reposo
Cubre el bol con un paño limpio y déjalo reposar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño. Esto puede tardar entre 30 y 60 minutos, dependiendo de la temperatura ambiente. - Segunda mezcla y amasado
Agrega los 350 g restantes de harina integral junto con la sal. Mezcla bien hasta integrar todo y luego amasar sobre una superficie limpia. Si se pega un poco, puedes ponerte unas gotas de aceite en las manos para facilitar el trabajo. - División y formado
Divide la masa en 12 porciones iguales. Forma bolitas con las manos, boleando ligeramente para darles forma redonda y suave. - Segunda fermentación
Coloca 6 bolitas en cada molde rectangular previamente engrasado, dejando espacio entre ellas. Cubre nuevamente con un paño y deja que dupliquen su tamaño, unos 30 a 45 minutos. - Pincelado y horneado
Pincela con yema de huevo batida para que doren de forma pareja.
Hornea en horno precalentado a 180 °C durante 30 minutos o hasta que estén dorados. - Enfriado
Retira del horno, deja reposar 5 minutos en el molde y luego desmolda.
Coloca sobre una rejilla para que se enfríen completamente.
🍽️ Consejos para servir y almacenar
Este pan integral es versátil y delicioso tanto tibio como frío. Puedes:
- Servirlo con un toque de mantequilla y una pizca de sal marina.
- Acompañarlo con aguacate y huevo poché para un desayuno completo.
- Untarlo con mermelada casera o miel para un toque dulce.
Para conservarlo:
- Guárdalo en una bolsa hermética o recipiente de pan por hasta 4 días a temperatura ambiente.
- También puedes congelarlo una vez frío. Solo pon los bollitos en una bolsa tipo ziplock y guárdalos por hasta 2 meses. Para descongelar, basta con dejarlos a temperatura ambiente o calentar en horno unos minutos.
💡 Notas útiles
- ¿No tienes moldes rectangulares? Puedes usar cualquier molde apto para horno, solo asegúrate de engrasarlo bien.
- ¿Quieres una versión más ligera? Reemplaza la mantequilla por aceite vegetal o de coco.
- ¿Amas las semillas? Espolvorea semillas de sésamo, chía o avena encima antes de hornear para un toque crujiente.
- Puedes adaptar esta receta para hacer panecillos individuales, panes rellenos o incluso una trenza integral.
❓ Preguntas frecuentes
¿Puedo usar harina blanca en lugar de integral?
Sí, aunque cambiará el sabor y la textura. La harina blanca da un pan más esponjoso, pero con menos fibra.
¿Cómo sé que la masa está bien fermentada?
Debe duplicar su volumen y, al presionarla suavemente con el dedo, la huella debe mantenerse.
¿Puedo usar leche vegetal?
Sí. Leches como la de avena, almendra o soya funcionan bien, aunque pueden cambiar ligeramente el sabor.
¿Qué hago si la masa está muy pegajosa?
Es normal que esté un poco pegajosa. Usa un poco de aceite en tus manos para manejarla mejor. No agregues demasiada harina extra o el pan quedará seco.
¿Puedo hacer la masa la noche anterior?
Sí. Haz la primera fermentación, luego guarda la masa en el refrigerador cubierta con film. Al día siguiente, forma las bolitas, déjalas reposar y hornea.
🥰 Conclusión
Hacer tu propio pan integral hecho en casa es una experiencia gratificante que te conecta con los sabores reales y nutritivos de la cocina. Esta receta es perfecta para principiantes y amantes del pan que buscan una opción saludable, deliciosa y casera.
No necesitas más que ingredientes sencillos, un poco de paciencia y muchas ganas de disfrutar. Y lo mejor es que puedes personalizarla con tus sabores favoritos: semillas, hierbas, frutos secos o incluso un toque de miel en la mezcla.